Cada vez que llega la época estival nos encontramos con las dudas de siempre para acometer las vacaciones con la familia y salir airosos de ellas.
El viajar con niños es una gran experiencia tanto para ellos como para los padres, forma parte de su educación para enseñarles otras culturas, otros lugares y conocer de primera mano la gastronomía y otros idiomas para ampliar sus conocimientos. Todo esto les ayuda a ser más flexibles, adaptables y les crea recuerdos familiares que evocarán a lo largo de su vida.
Uno de los momentos más importantes es el momento de elegir el destino, hay que tener en cuenta los diferentes gustos e intereses de los miembros de la familia, asi como de las posibilidades económicas de la misma, siendo los adultos los que tomen las decisiones finales.
Si es el primer viaje con niños, deberían organizar un viaje más tranquilo con tiempos cortos en los trayectos, tener en cuenta los posibles inconvenientes médicos, además de comprobar en el lugar de destino todas las opciones de diversión para los más pequeños.
Cuando viajamos con bebés es importante coordinar los horarios de comidas y sueños a los desplazamientos para que sea más llevadero. El capazo para los desplazamientos más largos son ideales, también podríamos llevar una mochila portabebés para aquellas excursiones o paseos cortos donde la imposibilidad de portar un carrito sea posible; además de cómodas, prácticas y se pliegan fácilmente.
Hoy en día en casi todos los establecimientos disponen de una zona destinada para bebés, con casi todas las comodidades propias para ellos desde un calientabiberones, cambiadores, microondas, etc., pero siempre debemos tener a mano útiles de usar y tirar como toallitas, pañales, comidas preparadas, para evitar posibles retrasos a la hora de encontrar lugares adecuados para los cambios de pañales o de comidas.
Para evitar cualquier sobresalto, les dejamos lo que no podemos olvidarnos de los más pequeños: una toalla, su muñeco favorito, un sombrero o gorra, gafas de sol, protección solar, gafas de piscina, bañador, zapatos cómodos, pequeño botiquín, una linterna, adaptador internacional, juegos variados, así como libros y lápices de colores; todo ello metido en una maleta divertida y con ruedas.
By Elena del Real @moadiario
