Los párpados caídos y las bolsas de los ojos pueden sugerir una imagen de fatiga y cansancio no acorde con tu estado físico y de salud. La corrección quirúrgica de la zona periocular te ayudará a rejuvenecer la mirada y cambiar esa imagen de fatiga.
La mirada es seguramente la característica más importante del rostro y, sin duda, es en lo que más nos fijamos cuando hablamos con otras personas. Por eso, es de vital importancia dedicar una atención especial a la delicada piel que rodea nuestros ojos, cuidando nuestra rutina de belleza, ya que nos ayudará a reflejar una imagen de frescura y juventud.
Sin embargo, con el paso del tiempo, muchas personas presentan un exceso de piel en la zona, que solo se puede revertir por medio de una cirugía muy sencilla, puesto que se realiza con anestesia local y sedación, pero que es realmente muy favorecedora.
El proceso de envejecimiento de los párpados se ve influenciado por múltiples factores, llegando a evidenciarse en algunos casos desde muy pronto. A partir de los 35 años en adelante, comienzan a aparecer los primeros signos de descolgamiento de los párpados superiores y de laxitud de la musculatura periocular. Al mismo tiempo se puede ir produciendo una gradual acumulación de grasa que forma pequeñas bolsas bajo los ojos. Esto es especialmente frecuente en fumadores y personas que han sufrido una alta exposición solar, si bien suele estar favorecido por una mayor predisposición genética.
La cirugía de párpados, llamada técnicamente blefaroplastia, proporciona una solución para mejorar dicha disconformidad estética. No en vano, esta es, en palabras del doctor García, la intervención que más rejuvenece el rostro. Estamos ante una de las cirugías más gratificantes que existen, ya que sin dolor ni prácticamente cicatrices, el paciente logra un rejuvenecimiento considerable de la expresión y la mirada.
La blefaroplastia consiste en una técnica quirúrgica sencilla que se realiza en quirófano con anestesia local y sedación superficial y que permite extirpar tanto la grasa como el exceso de piel del párpado superior e inferior.
Algunos pacientes solo serán candidatos a la corrección de sus párpados superiores y, en este supuesto, la cirugía se realiza de forma ambulatoria por lo que, después de ser retiradas las vendas de compresión que se colocan al final de la operación, el paciente podrá volver a casa unas horas más tarde.
En los casos en que se realicen en el mismo acto quirúrgico, conjuntamente los párpados superiores e inferiores, se deberá permanecer una noche en el Centro Hospitalario a fin de reducir a lo más mínimo los hematomas posteriores, de manera que estos serán prácticamente inexistentes gracias a la minuciosa técnica empleada por nuestro especialista.
El doctor Antonio García realiza las incisiones siguiendo líneas y arrugas naturales, por lo que las cicatrices serán prácticamente inapreciables. Dependiendo del caso, puede resecar la piel y realizar pequeñas modificaciones como acentuar o disminuir los pliegues palpebrales y realizar tracción del canto externo, produciendo el efecto de “ojo almendrado”.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que esta cirugía no corrige las llamadas patas de gallo, estando indicado para combatirlas, específicamente, la aplicación milimétrica de Bótox por parte del doctor. Además, en CENTRO SALUD ESTÉTICA también puedes cuidar el contorno de los ojos por medio de LPG médico con un manípulo específico para esta delicada zona y reforzar el efecto tensor a través de radiofrecuencia ENDYMED.
Dentro de su extenso curriculum, Antonio García se formó en cirugía oculoplástica en el Moorfields Eye Hospital de Londres, junto al profesor Richard Collin, expresidente de la Sociedad Europea de Cirugía Oculoplástica y Reconstructiva (ESOPRS).
