Las faldas largas, que nunca han dejado de estar de moda, son muy femeninas y elegantes y, aunque en ocasiones nos puedan parecer complicadas de combinar, en realidad no lo son tanto, nos basta simplemente con aprender a llevarlas.
Nos atrevemos a decir que son un “must have” en nuestro armario, tengamos en cuenta que las podemos adaptar a cualquier época del año.
Como primera apuesta elegiremos llevarlas a la cintura, así estilizarán más nuestra figura provocando el efecto visual de que nuestras piernas son más largas y luciremos un look más elegante. Aún así, si decidimos llevarlas a la cadera conseguiremos que el look sea más informal, pero perfectamente válido si es lo que estamos buscando. Son prendas que se adaptan a cualquier tipo de personalidad, gusto o estilo.
Las podemos combinar perfectamente con cualquier tipo de camisa o top muy sencillo, que definan nuestra silueta, pero sin que nos queden ni muy ceñidas ni muy largas. El elemento destacado ya es la falda y no debemos caer en el error de robarle protagonismo.
Para aquellas mujeres que seamos algo más bajitas debemos tener en cuenta que nos favorecerán mucho más si son de un solo color, si finalmente nos decantamos por un estampado éste no debe ser muy grande.
En cuanto al calzado nos favorecerá a todas utilizar alguno con tacón, pero si somos de las que preferimos un calzado más cómodo y plano, siempre tendremos en cuenta el largo de la falda, nunca nos debe arrastrar por el suelo, así luciremos más elegantes y estaremos mucho más cómodas.
Son prendas fantásticas para llevar de día y super elegantes para la noche. En este último caso las podemos combinar con tops de brillos, escotes especiales, en saten o seda, y nuestros “supertaconazos”, añadiendo complementos a juego. Si queremos o necesitamos alguna prenda de abrigo elegiremos una blazer para la noche y una cazadora vaquera o piel para el día.