En muchas ocasiones, nos hemos hecho la siguiente pregunta ¿Para qué sirve la colorimetría en la asesoría de imagen? ¿Es tan importante como los expertos se empeñan en hacernos creer? Además, ¿Si a mí me gusta el color verde (por ejemplo) por qué me tengo que poner una prenda de un color con el que no me siento cómoda? Si bien es cierto que este pensamiento lo podemos tener en un primer momento, cada vez más sentimos curiosidad por saber qué colores son los que más nos favorecen.
Pero, ¿Cómo sabemos cuáles son estos colores? La colorimetría es un estudio que nos permite encontrar la paleta de colores que ayuda a potenciar nuestra “belleza” y disimular nuestros defectos. El conocer qué tipo de mujeres u hombres somos en cuanto al análisis de color nos ayudará a la hora de elegir colores en: ropa, muebles, entorno, elementos de decoración, etc.
Existen tantas teorías del color como manuales tratan este tema: El sistema de las 4 estaciones, el sistema de las 12 estaciones, sistema tonal, mixto etc.
Cuando se trata de explicar cuál es nuestra paleta de colores y cómo sacarnos el máximo partido, lo más sencillo es siempre lo mejor. Para ello, vamos a clasificar a las personas y a los colores en cálidos, fríos y neutros.
Lo primero que tenemos que saber es el tono de nuestra piel: si nuestro tono de piel es amarillo o dorado, seremos una persona cálida; si nuestro tono de piel es rosa o rojizo seremos una persona fría. Excepcionalmente puede que tengamos un tono neutro. Para hacer una clasificación más detallada no solamente tenemos que tener en cuenta nuestro tono de piel sino que, además, tenemos que atender a nuestro color de pelo y el color de nuestros ojos.
Podemos concluir, por lo tanto, que las personas son:
1. Cálidas: aquellas que tienen rasgos, a mi parecer, muy «latinos» pelos
castaños, morenos, ojos oscuros sin grandes contrastes; Los colores
cálidos serán los rojos, naranjas y amarillos, además de los colores tierras.
2. Frías: se caracterizan por ser personas con una imagen «nórdica», pelo rubio, ojos claros, piel blanca; Los colores fríos son los verdes, azules y violetas.
3. Neutras: son aquellas a las que les favorece cualquier color.
Lo realmente importante y lo que quiero transmitiros es que es mucho más importante que utilicemos los colores con los que nos sentimos más favorecidas o aquellos que más nos gusten que aquellos otros que dictan las teorías del color. No se trata de cumplir nuestra paleta de colores a pie juntillas, sino de hacer que nuestra imagen sea espectacular! ¿Lo podemos conseguir? La respuesta es Sí, siempre que tengamos en cuenta unos pequeños trucos:
1. Los colores que más nos favorecen siempre los utilizaremos cerca de la cara.
2. Si según la colorimetría, los colores que más nos favorecen, resulta que no son nuestros preferidos, (por ejemplo, soy una persona cálida pero me encanta el azul) no pasa nada, siempre podremos introducir la gama de nuestra paleta de colores en los complementos como fulares, collares etc.
3. Si tenemos la piel muy clara, evitaremos, en la medida de lo posible los colores muy oscuros, como por ejemplo, el negro o el azul marinoporque nos hará más pálidas de lo que realmente somos.
4. Si tenemos los ojos claros podemos utilizar prendas del mismo color que nuestros ojos porque harán que nuestra mirada brille.
5. El maquillaje será nuestro gran aliado para crear una imagen perfecta. Por ejemplo si somos muy pálidas y nos ponemos un vestido negro podemos contrarrestar un poco el blanco de nuestro rostro con el negro intenso de nuestro vestido con unos labios rojos y/o unos ojos ahumados.
6. Cuidado con los colores: Si tenemos los rasgos muy oscuros el color negro no será nuestra mejor elección; si por el contrario somos muy pálidas el color blanco puro tampoco será un acierto ya que en ambos casos, no se verá donde acaba nuestra prenda de vestir y donde empieza la persona. En estos casos, una buena opción para sustituir al negro es el color gris y para sustituir al blanco, el color nude o blanco roto.
7. Si somos personas cálidas siempre nos van a favorecer más los complementos dorados; si por el contrario, somos personas frías nos favorecerán más los complementos el plata o de oro blanco.
Por último, recordaros que a la hora de vestir tenemos que tener en cuenta lo que se conoce como la «psicología del color» es decir, qué significa cada color. Es muy importante saber lo que queremos transmitir y lo que realmente transmitimos con cada color… que en muchas ocasiones puede ser erróneo!Por ejemplo, el color rojo enmarca personalidad pero también provocación y sensibilidad, el amarillo transmite alegría y esperanza, el color azul evoca calma, confianza etc.
Espero que al finalizar este post hayáis llegado a la misma conclusión que yo: La colorimetría y la asesoría de imagen son la combinación perfecta!
Queca Personal Shopper.