Acto de entrega del Premio IUEM 8 de Marzo 2017
El pasado 15 de marzo se celebró, en el Salón de Actos del Instituto de Bio-orgánica Antonio González de la ULL, la entrega del Premio IUEM 8 de Marzo de Reconocimiento a las investigadoras de la ULL.
Hace ya dos años, para conmemorar el 8 de Marzo, un grupo de investigadoras de diferentes campus nos hacíamos una foto conjunta bajo el lema ideado por la Unidad de Igualdad de Género: El mundo necesita mujeres científicas, ¿quieres ser una? Otros grupos de mujeres en otros espacios de la ULL también lo hicieron, unas fotos para visibilizar, para decir estamos aquí, trabajamos y contribuimos a la tarea de la construcción de los conocimientos.
El año pasado, a partir de aquella iniciativa que no quisimos que quedara en hecho aislado o una mera anécdota, pensamos que no solo era necesario visibilizar, sino también reconocer los logros: las trayectorias de investigación, las publicaciones destacadas, la concesión de importantes premios y proyectos de excelencia o una destacada trayectoria docente e investigadora. Surgió así la idea de dar forma a un reconocimiento anual a las investigadoras de la ULL. Los consejos de los Institutos acogieron la idea con entusiasmo y otorgamos el Premio a las Doctoras Teresa Giráldez y Maravillas Aguiar.
El Premio IUEM 8 de Marzo. Reconocimiento a las investigadoras de la ULL pretende dar visibilidad y reconocimiento a la importante labor realizada por las mujeres que dedican su vida al conocimiento. Mujeres de todas las ramas del conocimiento, jóvenes y destacadas investigadoras de los programas de excelencia o del PDI con una trayectoria destacada, mujeres que redactan libros y publican relevantes artículos. Mujeres que dirigen y gestionan proyectos de investigación, pasan horas en laboratorios, y realizan estancias en otras universidades, que forman a nuevas generaciones y que compatibilizan vida familiar y privada con la dedicación a la investigación, a veces, lo sabemos, en un imposible juego de malabares.
Es más destacable aún su trabajo y sus méritos, si tenemos en cuenta que han de seguir luchando también contra los estereotipos aún presentes en nuestra cultura y con las barreras estructurales, institucionales y mentales que dibujan cañerías que gotean, lo que ilustra el abandono ante la multitud de obstáculos o techos de cristal que dificultan su acceso a los lugares más altos y prestigiosos de la academia.
En esa línea intervinieron en la presentación del acto la Dra. Ana Puy, Directora de la Unidad de Mujer y Ciencia, del Gabinete de la Secretaría de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación, del Ministerio de Economía y Competitividad, quien destacó los esfuerzos por diseñar e implementar políticas que favorezcan la incorporación igualitaria de las mujeres a los equipos de investigación en Europa, así como la incorporación de la perspectiva de género en los contenidos de la investigación, promoviendo así una ciencia y unos conocimientos de mayor calidad y excelencia. En Europa, la desigualdad de género en ciencia sigue siendo un problema sin resolver. Los últimos informes publicados muestran que a pesar de los esfuerzos apenas hay avances significativos. Las mujeres representan el 60% de las personas con titulación superior en Europa y el número de doctorandas sigue creciendo, sin embargo, las mujeres permanecen infrarrepresentadas en el personal científico e investigador: solo el 33% en la Unión Europea y el 38% en España, estando el nivel de catedráticas solo en un inamovible 20%. Esta infrautilización de las mujeres con cualificación científica en todas las ramas del conocimiento en Europa explica que la Estrategia Europa 2020 se proponga reducir las desigualdades de género como uno de los factores del crecimiento inteligente, sostenible e integrador.
La Dra. Inmaculada Perdomo Reyes, directora del IUEM, destacó también que son necesarias más mujeres en todos los ámbitos del conocimiento. Los discursos implícitos en la cultura, los sesgos y las actitudes inconscientes transmiten a las más jóvenes la idea de que son menos capaces para el pensamiento analítico, lógico, matemático y racional y las exigencias de la ciencia o las ingenierías, lo que las aleja de estas opciones profesionales desde edades tempranas. En el campo de las Humanidades y las CC. Sociales también está presente, aunque en menor medida, el techo de cristal y también sufren las jóvenes investigadoras las restricciones y la escasa oferta de becas. Por ello, es necesario introducir cambios, ya que a pesar de la supuesta objetividad y neutralidad de valores, podemos identificar sesgos en las culturas de las instituciones: los valores, los modos de hacer y de visibilizar y reconocer que favorecen la presencia y el prestigio de los hombres. Los cambios estructurales y reformas institucionales demandados tienen que ver con eliminar los sesgos en las prácticas de contratación y promoción, y son necesarios también cambios en los estándares de evaluación o las políticas que faciliten la conciliación de la vida familiar, privada y profesional. El objetivo es crear las condiciones que permitan que las carreras profesionales de hombres y mujeres se desarrollen en igualdad de condiciones.
La Dra. Dulce Doreste, directora del Instituto de Estudios Medievales y Renacentistas, IEMYR, y en representación de todos los Institutos de Investigación de la ULL, incidió en la relevancia de la visibilización de los importantes logros de estas mujeres investigadoras, en actos como este, que sirvan de modelo a las nuevas generaciones y que ponga en valor la investigación realizada en el marco de los Institutos Universitarios de Investigación, una investigación inter y transdisciplinar en la mayoría de los casos y que configuran la punta de lanza de la investigación en la ULL. Un compromiso con las investigadoras y con la Igualdad, que también el Sr. Rector, D. Antonio Martinón, quiso subrayar como una de las señas de identidad que caracteriza sus políticas y el quehacer de su equipo de gobierno al frente del Rectorado de la ULL.
Las investigadoras que fueron reconocidas abrieron nuevos caminos al observar los problemas con nuevos ojos, integran nuevas perspectivas y también, a menudo, otros valores y maneras de hacer. Son muchos ya los ejemplos en los que la incorporación de la perspectiva de género produce conocimientos de mayor calidad y excelencia. Y muchos los ejemplos en los que las capacidades, el esfuerzo y la calidad y excelencia en la investigación llevan nombre de mujer.
Las investigadoras a las que mostramos nuestro reconocimiento, por decisión de la Comisión de concesión del Premio IUEM 8 de Marzo, fueron:
La Dra. Dolores Corbella Díaz, Catedrática de Filología Románica de la ULL, nombrada Académica correspondiente de la Real Academia Española (RAE) en sesión del 17 de diciembre de 2015. Fue presentada por Dña. Dulce González Doreste, Catedrática de Filología Francesa de la ULL, quien destacó que este nombramiento es un hecho muy relevante en la carrera académica de la profesora Corbella Díaz, pues según fuentes de la propia RAE «La categoría de académico correspondiente, formalizada en los estatutos de 1859, distingue a personas reconocidas por sus investigaciones, estudios y publicaciones sobre distintas materias relacionadas con la lengua o la literatura españolas». El nombramiento viene avalado por un curriculum vitae admirable, que refleja no solo unos logros extraordinarios en el campo de la investigación lexicográfica y otros ámbitos, sino una dedicación y un compromiso continuado con la docencia y la gestión académica en la Universidad de La Laguna, así como un trabajo profundamente enraizado con la sociedad canaria y lagunera en particular.
La Dra. Mercedes Prieto Muñoz, Profesora e investigadora del Instituto de Astrofísica de Canarias, IAC, y de la ULL, pionera de la Astrofísica en Canarias y de la Astrofísica observacional en España. Fue presentada por D. Francisco Sánchez, anterior director y pionero promotor del IAC, quien relató las duras condiciones en las que la Dra. Prieto comenzó su carrera, en observatorios que no disponían de comodidades y cómo, una vez ya en Canarias, se incorporó en 1974 con una beca del MEC al grupo de fotometría infrarroja que dirigía el Dr. Carlos Sánchez, equipo que va construyendo las condiciones materiales y humanas, que promovieron una brillante carrera con contribuciones muy destacadas a la astrofísica actual y, en concreto, al estudio de las galaxias lejanas. Desde sus comienzos ha estado también involucrada en la enseñanza, ha contribuido a la formación de muchas generaciones de astrofísicos y astrofísicas, en el IAC y en la ULL.
La Dra. Carolina Mallol, Investigadora Ramón y Cajal en Arqueología, Departamento de Geografía e Historia. Instituto de Bio-orgánica Antonio González. Líder de PALEOCHAR (ERC Consolidator Grant Project). Fue presentada por Dña. Bertila Galván Santos, profesora titular del Área de Prehistoria, ULL, quien destacó la brillante formación y carrera de la Dra. Mallol, doctora por Harvard, universidad con la que tuvo vinculación hasta el 2004, e investigadora Marie Curie en Francia, antes de vincularse a la ULL. Siendo el hito más importante, hasta ahora, la concesión de un importante proyecto europeo con una financiación de alrededor de 2.5 millones de euros que le permitirá crear y consolidar un gran equipo de investigación arqueológica en la ULL. Como explicó, aborda el estudio de las antiguas poblaciones a través de las evidencias microscópicas y moleculares de naturaleza orgánica recogidas en los yacimientos. Por medio del estudio del registro sedimentario orgánico en dichas escalas, extraen información sobre, por ejemplo, el contenido en grasas de la comida neandertal, el modo en el que hacían fuego, la organización de espacios de ocupación, la vegetación circundante y las condiciones climáticas en las que vivieron. Combinando estas fuentes de información aspiran a proporcionar una visión más completa del mundo neandertal, aunque también realizan investigaciones y estudios sobre la población aborigen de nuestras islas.
Las Doctoras agradecieron la concesión del Premio IUEM 8 de Marzo y destacaron cómo la aventura por el conocimiento había sido el motor de sus vidas, reivindicaron la necesidad de un mayor apoyo a las nuevas generaciones de investigadoras e incidieron en la necesidad, a pesar de las exigencias actuales de una sociedad que impone ritmos vertiginosos, de comprender que el proceso investigador requiere de creatividad, exige trabajar en redes y comunidad, y que el proceso de reflexión a veces debe ser más lento y cuidadoso para que la ciencia y los conocimientos alcancen los niveles de calidad y excelencia deseados.
Queremos hacer mención y dar un agradecimiento especial al escultor Alfonso García por su contribución con la elaboración de las esculturas de su serie la Danza mágica, imagen ya de nuestro Premio IUEM 8 de Marzo.
Autor: Inma Perdomo